Maharaji

Más rico de lo que puedas imaginar

La primavera ya está aquí. Tras el invierno, llega la estación que trae la vida. Otra expresión de algo que despierta. La primavera también tiene que venir a nuestras vidas, ya que estamos en la Tierra. Esta Tierra es increíblemente única. No hay nada igual en millones y millones de años luz.

Te sueltan en este viaje de la vida. ¿Y qué es lo que tienes? ¿Cuáles son tus herramientas? Muy sencillo, un deseo de ser feliz. Puede que no pienses que eso sea una herramienta, pero es una de las más importantes. Hay un deseo de satisfacción en cada ser humano. Es precioso si realmente entendemos que es nuestra riqueza, no nuestra debilidad.

Buscamos, pero no sabemos lo que estamos buscando. Sabemos qué es lo que no nos atrae. Conocemos nuestras aversiones, pero no sabemos qué es lo que nos atrae.

¿Cuál es tu naturaleza? Tenemos muchas ideas: “Tengo que hacer esto, debo ocuparme de aquello, ésa es mi responsabilidad, soy esto, tengo que tener eso, quiero progresar en mi vida...”.

Y hay una definición de lo que significa progresar. Hay unos objetivos marcados: “Cuando consigas esto y lo otro, lo habrás logrado”. La pregunta es: ¿quién lo habrá logrado? Mucha gente dice: “Creo que lo conseguí”, y al momento están pasando por un verdadero infierno. Decimos: “Quiero lograrlo, quiero estar ahí, quiero ser de tal manera”.

Mientras ocurre todo eso, nos sentimos pobres y hambrientos; con hambre de algo que no sabemos lo que es. No estoy hablando de comida, sino de tener hambre de que todo esté bien, de que sea como debe ser. Y también nos sentimos pobres, por todo lo que no tenemos. La gente dice: “Me gustaría saber pilotar un avión, ojalá pudiera pintar así, o cantar, o tocar como aquél”. Esas dos condiciones —ser pobre y hambriento— no están bien para este mundo.

Kabir, un poeta del siglo XIV, dijo: “Nadie está hambriento y nadie es pobre. Todo el mundo es más rico de lo que se pueda imaginar”. Cada persona lleva empaquetado consigo algo maravilloso, pero no lo han abierto. Por eso no tienen nada. Él se refería a los seres humanos en la Tierra, haciendo ese viaje en el que llevamos tantos siglos.

No deberías confundir el propósito de tu existencia con lo que podrías lograr en este mundo. Cuando el corazón está lleno hay una sencillez, hay una claridad en la vida. ¿Que es lo único que satisface a mi corazón? ¿Cuándo me siento vivo? Hablo de sentirse vivo.

No se trata de imaginarlo, sino de sentirlo. Sentir. Cuando te enamoras tienes que sentirlo. Sentirte vivo, sentirte real, sentirte tan único como en realidad eres. Tu vida. No la vida de otro, ni una biografía. Tu vida. Tú.

¿Quién eres? ¿Eres un ser que ha sentido su corazón y se ha bañado en esa plenitud, en esa comprensión, en ese silencio, en esa tranquilidad? ¿Te has zambullido en el océano de la serenidad y te has sentido limpio, renovado, fresco? ¿O sientes la suciedad de toda la confusión que hay en ti, pegajosa, sucia, polvorienta? ¿Qué sientes?

Lo que yo ofrezco es la posibilidad de limpiarte, de sentirte fresco sin todo ese polvo y suciedad. No se trata de cómo llegó a ti, sino de que te lo puedes quitar de encima. Ésa es la cuestión. La gente dice: “Voy a pensar en una forma de evitarlo”. Lo han estado intentando desde hace muchísimo tiempo. No se trata de pensar, se trata de sentir. Se trata de bañarse en las aguas cristalinas de la claridad. ¡Zambúllete! Toma un baño. Límpiate y siéntete libre. Siente la libertad.
Eres único en un planeta único. Eso es lo que hace que todo sea tan especial. No hay dos momentos iguales. Aquí estás. No sabes lo que está pasando ahí fuera. Es hostil. El día en que empieces a sentir lástima de ti mismo, piensa en esto: hay tormentas solares que llegan a la Tierra con tal furia que, si no fuese por nuestra atmósfera y por el núcleo magnético de la Tierra, no quedaría nada. Ese aire tan fino que hay sobre ti te está protegiendo.

Siéntete admirado por esta existencia. Maravíllate por este aliento. Admira la vida en lugar de fijarte en la larga lista de todo lo que está mal en ella.

Yo voy de un lugar a otro y hablo a la gente de ese paquete que se les ha dado, un paquete muy interesante que lo contiene todo. Nadie tiene hambre, nadie es un mendigo. Todo el mundo es más rico de lo que es posible imaginar.

Lee tu propio libro. Tu libro, tu corazón. ¿Te sientes solo? Nunca debería ser así, porque nunca estás solo. Vayas adonde vayas, tu mejor amigo siempre te acompaña, en los momentos buenos y en los malos, hasta el mismísimo final. Entabla una relación con ese amigo. Eso es lo que tiene que suceder.

Maharaji