02 junio 2007

Escucha al pájaro cantor, ignora al cuervo


Durante el día escucho al pájaro cantor y también al cuervo. ¿Qué voy a hacer? ¿Guardarme una piedra en el bolsillo para arrojársela al cuervo? En realidad, no es necesario que le preste atención al cuervo cada vez que lo oigo cantar; sin embargo, cuando el otro pájaro canta, puedo dirigir mi oído hacia él y escucharle. ¿Y quién lo disfrutará sino yo? “¿De dónde vienen estos cuervos? Hay que matarlos”, dicen algunos. Pero cuando sentimos esa ira, esos celos, ¿a quién quemará su fuego? Cuando sientes celos hacia otra persona, ¿quién sale lastimado, ella o tú? Cuando te enojas con alguien, ¿a quién crees que quemará el fuego de la ira sino a ti?

Le dijo una vez a un hombre un genio: “Pide un deseo. Lo que quieras. Pero recuerda, de lo que pidas, tu vecino recibirá el doble”. Así que, el hombre, después de pensarlo, le respondió: “De acuerdo. Quisiera tener millones y millones de rupias”. El genio le recordó: “Tu vecino recibirá el doble de dinero”. Y el hombre continuó: “De acuerdo, no me importa”. Así que, tras concedérsele el deseo, su vecino obtuvo el doble. Al día siguiente, cuando el hombre llamó al genio, éste le preguntó: “Y ahora, ¿qué deseas?”. El hombre contestó: “Golpéame hasta que me dejes medio muerto”.

Siempre habrá problemas, ¿verdad? Pero si nos enojamos con otra persona, somos nosotros los que salimos lastimados. Por lo tanto, esta oportunidad que tenemos, no la perdamos.

Maharaji en Nueva Delhi, 28 de marzo de 1999. Fragmento traducido del inglés.

No hay comentarios: